Entre los países de la OCDE, México ocupa el último lugar en la realización de pruebas de COVID-19 por cada mil habitantes
De acuerdo con el informe ‘Pruebas para COVID-19: una forma de levantar las restricciones de confinamiento‘, la organización señaló que Islandia es el país que más ha llevado a cabo pruebas para detectar casos positivos del nuevo coronavirus, con 135 por cada mil habitantes; seguido de Luxemburgo, con 64.6.
Le siguen Lituania, con 37.4 pruebas por cada mil habitantes; Estonia, con 37.2; Noruega, con 30.2; Israel, con 30; Italia, con 29.7; Suiza, con 29.2; Dinamarca, con 26.9, y Austria, con 26.5.
En el caso de México, nuestro país sigue en la última posición de la tabla, con 0.4 pruebas realizadas por cada mil habitantes, de acuerdo con el corte del 28 de abril de 2020.
La OCDE explicó que el informe abarca el papel de las pruebas de COVID-19 como parte de un plan para levantar las restricciones de confinamiento y prepararse para una posible nueva ola de infecciones.
El mensaje principal en este informe fue y sigue siendo alentar firmemente a los países a ampliar sus esfuerzos en las pruebas en el contexto de la actual crisis de coronavirus”, aclaró la OCDE este martes.
Detalló que tras evaluar las diversas opciones para esta información, se determinó que los datos disponibles más confiables se encontraban en Our World In Data (OWID), por lo que se realizó una nueva versión revisada de la primera tabla publicada el 24 de abril.
Es importante tener en cuenta que la comparabilidad internacional de todas las cifras de pruebas es limitada, ya que existen diferencias en cuanto a si las cifras incluyen pruebas o individuos evaluados; si incluyen todas las pruebas de laboratorio (públicas y privadas) o no; y sobre con qué frecuencia los países actualizan los datos”, explicó.
Destacó que varios países han aumentado el número de pruebas disponibles, lo que les es importante para mejorar la capacidad de las naciones para controlar la propagación del virus.
La OCDE reiteró la necesidad de continuar y fortalecer dichos esfuerzos, toda vez que sin pruebas, el confinamiento será más largo de lo necesario.
El informe analiza cómo se pueden utilizar las estrategias de prueba para lograr tres objetivos principales:
- Suprimir el resurgimiento de brotes locales.
- Identificar a las personas que han desarrollado algún tipo de inmunidad y pueden regresar al trabajo de manera segura.
- Obtener datos sobre la evolución de la epidemia, incluso cuando se ha alcanzado un umbral para la inmunidad.
Con información de López-Dóriga Digital